Sudán del Sur celebra el tercer aniversario de su independencia sumido en una grave crisis fuera de control

Publicado: 8th Julio 2014

Oxfam advierte de que la atención de la comunidad internacional está puesta en otros lugares mientras el peor desastre del continente africano sigue sin recibir los fondos necesarios.

Con motivo del tercer aniversario de la independencia de Sudán del Sur, Oxfam ha advertido de que los llamamientos para financiar las labores de ayuda siguen sin recibir una respuesta suficiente y, así, la crisis humanitaria que asola el país continúa agravándose, fuera de control. El número de personas que sufre desnutrición y enfermedades o que se ve obligada a abandonar sus hogares no deja de aumentar.

Sudán del Sur es, actualmente, la peor crisis del continente africano, con cerca de cuatro millones de personas (un tercio de su población) en riesgo de padecer hambre aguda. Por el momento, tan solo la mitad de estas personas han recibido ayuda humanitaria. Naciones Unidas ha advertido de que si no se incrementan los esfuerzos por proporcionar asistencia, 50.000 niños y niñas podrían morir víctimas de la desnutrición. Desde que la crisis comenzó en diciembre del pasado año, los combates han obligado a 1,5 millones de personas a huir de sus hogares. El número de personas desplazadas no deja de aumentar.

Los llamamientos económicos siguen sin recibir respuesta. El llamamiento de Naciones Unidas, de 1.800 millones de dólares, ha recibido menos de la mitad de los fondos solicitados. La propia petición de fondos de Oxfam tan solo ha logrado recaudar la mitad de los 30,35 millones de dólares de los que precisa.

"La peor catástrofe humanitaria de África no está recibiendo la atención necesaria y, mientras, los habitantes de Sudán del Sur se ven sumidos irremediablemente en la miseria. Nos acercamos a una situación límite. Si los fondos necesarios para ayudar a las personas en riesgo de padecer hambre, enfermedades o ataques violentos no comienzan a llegar pronto, no conseguiremos evitar una hambruna. Tras seis meses de crisis, los esfuerzos humanitarios flaquean y no sobrevivirán sin la inyección de fondos necesaria”, afirma la directora ejecutiva de Oxfam, Winnie Byanyima.

En los tres estados más afectados de Sudán del Sur –Alto Nilo, Unity y Jonglei–, las tasas de desnutrición infantil no paran de aumentar. En las últimas semanas, miles de personas, muchas afectadas por la desnutrición, han llegado al campo de refugiados de Naciones Unidas en Bentiu (Unity) y en tan solo seis semanas 100 niños y niñas han muerto en el campo. En el campo de la ONU en Malakal (Alto Nilo) y en Bor (Jonglei), las personas viven en condiciones deplorables y deben caminar hundidas en el barro y con el agua hasta la rodilla. El agua estancada debido a las intensas lluvias incrementa el riesgo de enfermedades. A mediados de abril se detectó un brote de cólera en la capital, Juba, y, aunque este ya ha sido controlado, se teme que la enfermedad pueda extenderse a otras áreas. Los combates en el Alto Nilo están limitando la provisión de ayuda y en Jonglei más de 400.000 personas se han visto obligadas a huir de sus casas.

Los refugiados, en condiciones de extrema debilidad

Los refugiados que consiguen llegar a países vecinos lo hacen en condiciones de extrema debilidad y cansancio. Más de 158.000 personas se han refugiado en Etiopía. En los hospitales gestionados por Médicos Sin Fronteras, uno de cada diez niños admitidos muere. Asimismo, 117.000 personas se han refugiado en Uganda, 85.000 en Sudán y casi 40.000 en Kenia.

Hasta ahora, Oxfam ha asistido a más de 260.000 personas en Sudán del Sur, proporcionándoles alimentos, agua limpia, saneamiento y dinero en efectivo. En Etiopía, Oxfam está ayudando a instalar sistemas para el agua y el saneamiento en los campos de refugiados y en Uganda ha proporcionado ayuda a casi 45.000 personas.

Los combates deben terminar cuanto antes

"Esta no es una crisis causada por una sequía o por inundaciones. Se trata de una crisis política que ha derivado en una terrible situación de violencia. Los habitantes de Sudán del Sur solo podrán recuperar sus vidas si los combates terminan. Mientras las negociaciones de paz continúen estancadas y no se presione a las distintas partes para que alcancen una solución pacífica, apenas hay esperanzas de que el conflicto cese pronto. Y esa paz solo durará si se atiende a las necesidades de los ciudadanos y ciudadanas de Sudán del Sur".

"Mientras tanto, la población civil atrapada en un conflicto del que no es responsable precisa de la generosa ayuda internacional para evitar una hambruna y más sufrimiento. Por el bien de estas personas, en semejante momento de crisis,no podemos mirar a otro lado ", subraya la directora ejecutiva de Oxfam, Winnie Byanyima.

Si los fondos necesarios no comienzan a llegar pronto, no conseguiremos evitar una hambruna.
Winnie Byanyima
Directora ejecutiva de Oxfam Internacional

Notas para editores

Información de contacto

Vanessa Parra, en Sudán del Sur, +211 0955 107 850 vparra@OxfamAmerica.org
Grace Cahill, en Sudán del Sur, +211 928 926 613 GCahill@oxfam.org.uk  twitter: grace_cahill