Funcionario recomendó al Gobierno a tomar acciones inmediatas para remediar impactos
(Lima, 4 mayo del 2016). Tras un recorrido por la zona de influencia del Lote 192, Baskut Tunkat, relator especial de las Naciones Unidas para sustancias químicas peligrosas y desechos, mostró su preocupación por la extensión de la contaminación en la zona. “Realmente es muy urgente y deben haber algunas acciones inmediatas para la remediación”, dijo. Las declaraciones las formuló en el marco del foro “Contaminación sin remediación: impactos socioambientales en el Lote 192 y los derechos indígenas”, desarrollado en la Universidad Antonio Ruiz de Montoya el día de ayer.
“Visité Ushpayacu, uno de los lugares que supuestamente estaba remediado. Lo que hizo la compañía [Pluspetrol] fue drenar y llenar de arena. Lo que vi no era para nada un lugar rehabilitado. Se veía en la superficie del agua todo el petróleo. Antes de llegar al sitio se olía el petróleo a kilómetros de distancia”, detalló Tunkat. El funcionario de las Naciones Unidas sostuvo que el Estado tiene el deber de cuidar al ambiente y a las personas, pero los negocios la responsabilidad de tener el máximo cuidado, proteger y respetar los derechos humanos.
Tunkat recomendó al Gobierno acelerar los esfuerzos para hacer respetar los derechos. “Es el deber sagrado del Estado proteger los derechos humanos”.
Los Apus de la zona de influencia del Lote 192 demandaron al Congreso de la República la aprobación del proyecto de Ley N° 4933 que permitirá la remediación ambiental de la zona (deber del Estado y compromiso que fue suscrito por el actual Gobierno el 10 de marzo del 2015), pues autorizaría al Ministerio de Energía y Minas a suscribir convenios de cooperación técnica para la realización del estudio técnico independiente para el desarrollo de estrategias de remediación ambiental de las áreas afectadas por actividades de hidrocarburos.
Asimismo, pidieron que se fortalezca la implementación de la consulta previa, como derecho de los pueblos indígenas, así como garantizar y fortalecer la institucionalidad ambiental que permita fiscalizar las diferentes actividades, principalmente las extractivas. Para ese fin el rol de las organizaciones indígenas es fundamental “Si nosotros mismos no nos levantamos a defender nuestros derechos, quizá hasta ahora habríamos estado olvidados”, señaló el Apu Aurelio Chino, presidente de la Federación Indígena Quechua del Pastaza (FEDIQUEP).